En el corazón del Colegio Centro Don Bosco, el auditorio se presenta como un escenario clave para ceremonias, presentaciones artísticas y actos académicos tanto del colegio como de la Universidad Salesiana.
El reto: crear un espacio que ofreciera una experiencia inmersiva e inolvidable, integrando sonido, video e iluminación con precisión y estética.
Desde el diseño, el enfoque fue técnico y personalizado. Se realizaron estudios acústicos y simulaciones en conjunto con áreas de arquitectura y electricidad, asegurando que cada equipo encajara funcional y visualmente con el espacio.
Sistema de sonido profesional:
Se instaló un sistema de la línea Array en la tarima principal, complementado con cabinas frontales para unificar la onda sonora en todo el auditorio. En el mezzanine (zona VIP), se empotraron altavoces K-Array cuidadosamente direccionados para ofrecer una experiencia de sonido envolvente, sin afectar la estética del espacio.
Pantalla LED de gran formato:
Con 27 m² de superficie, esta pantalla ubicada en la parte posterior del escenario permite proyectar escenografías, vídeos institucionales y contenido visual con calidad excepcional. Fue instalada con precisión para garantizar su uso en eventos artísticos, académicos y religiosos
Iluminación sincronizada:
Se incorporaron tres sistemas de Truss motorizados estratégica mente distribuidos, que soportan luminarias programables capaces de integrarse con el audio y el vídeo. Esto permite generar atmósferas únicas en cada evento, desde una graduación solemne hasta una obra teatral vibrante.
El resultado fue un auditorio moderno, técnicamente impecable y emocionalmente poderoso. Un espacio que no solo se escucha y se ve, sino que se siente.
Tecnología que inspira
Cada lugar del Colegio Centro Don Bosco fue concebido como una oportunidad para transformar la experiencia educativa, espiritual y cultural de sus estudiantes. Desde el sonido ambiental que acompaña la vida diaria en los pasillos, hasta la atmósfera íntima y reflexiva de la capilla, pasando por el despliegue técnico y emocional del auditorio, este proyecto integró diseño, tecnología y sensibilidad en cada detalle.
En todos los ambientes, nuestro compromiso fue el mismo: escuchar las necesidades del cliente, entender el propósito de cada lugar y materializarlo con soluciones a la medida, pensadas no solo para funcionar, sino para emocionar, inspirar y perdurar en el tiempo.
Así, reafirmamos nuestro propósito de crear experiencias memorables a través del sonido, la imagen y la luz.
¡Y esto es solo el comienzo!

Muy pronto te compartiremos otro caso de éxito, donde la innovación y el diseño volverán a ser protagonistas de una transformación con sentido.